Para la derivación de pacientes se consideran entre otros aspectos los niveles de complejidad del prestador receptor (UTI – UCO – UCI – Aislamiento), la infraestructura disponible para la realización de estudios ó prácticas, todo ello en función de lo que pueda llegar a requerir el paciente en función de su diagnóstico / patología (Hemodinamia, TAC, RNM, etc.).